La apuesta por una comida en el centro de Madrid (Serrano 95) propiedad de la empresa Grupo Arturo Beltrán ha sido espectacular.
Hay palacios en la capital que albergan habitaciones con un magia especial. Este es uno de ellos, donde en un txoco, que dirían por el norte de España, hemos disfrutado de una comida de bodega.
Los vinos tienen cuidadas sus etiquetas tanto como el producto que llevan dentro de sus botellas. No obstante, esta es su principal diferenciación, según detalla Eduardo Lavín, director general de las bodegas
Es decir, unas entradas llenas de productos de la huerta cercana a las instalaciones de Corella (Camilo Castilla) y de Alfaro (Egomei), Navarra y La Rioja, respectivamente. El Ebro y su rivera dan para mucho.
Luego unas pochas (judías blancas más redondas que las habituales) cultivadas también en la zona. Y frescas que mejoran con mucho a las de conserva, a pesar de que estas estén buenas.
Para rematar un lomo en salsa a la Riojana, con pimientos y tomate. Si a todo esto le añades los diferentes moscateles secos y dulces de Camilo Castilla y el vino de crianza (Carpess) y Egomei y EgomeiAlma. La reunión es magnífica. Si no conocéis los vinos, es momento de probarlos.