Tal ha sido el impacto de la Covid-19 a nivel de gastronomía y ocio en el hogar, que en el último censo de consumo de alimentación a nivel familiar, el 10% del gasto medio que se consumía en hostelería ha revertido hacia el propio domicilio. Aumento de las ventas en vino, cerveza y productos procedentes del porcino ibérico como jamón y otros embutidos; son los productos estrella.
Según los hábitos de consumo y comportamiento del consumidor, el último informe del Observatorio español del Mercado del Vino – OeMv, las ventas han crecido ante el coronavirus un 25% respecto al ejercicio 2019; los meses de más crecimiento fueron abril, mayo y noviembre, de los cuales el 32% corresponden a vinos enmarcados en Denominaciones de Origen, siendo la demanda mayor en vino tinto, seguido por el blanco y por finalmente rosado. En cuanto a los meses mencionados de importante incidencia comercial, abril tuvo un crecimiento del 61,2%, mayo superó con +46,4% y noviembre con +44,5%. El precio medio de los vinos osciló entre los 8€ y 15€ por botella, con compras que alcanzaron entre los 120€ y 200€ por pedido.
La figura del Consejo Regulador es muy determinante a la hora de la compra de productos, principalmente en vino. Calidad y trazabilidad de origen es el punto de partida para que el consumidor elija su vino von Denominación de Origen. De mayor a menor, la escala de categorías de vino en España es Vinos de Pago, Denominación de Origen Calificada (Rioja y Priorat), Denominación de Origen, Vinos de Calidad con indicación geográfica, Vinos de la Tierra, Vinos de Mesa; los más demandados en términos comerciales son los tres primeros, aunque muchos son los adeptos, curiosos y principantes al fascinante mundo del vino que buscan y disfrutan la totalidad de categorías, incluso aquellos vinos de finca con distintivo “vinos de autor” que convierten al consumidor en un auténtico winelover.
Ignacio Isidoro Benítez
CEO | www.argataca.com