Jesús Rojas | Madrid |
En un entorno privilegiado, a tan solo 100 kilómetros de Madrid, se encuentra esta que bodega familar que realiza un trabajo manual en el viñedo con el objetivo de preservar la identidad del terruño y expresarlo en cada uno de sus vinos.
Finca Río Negro es una bodega que está aislada, alejada de otros viñedos, y su ubicación desafía los límites tradicionales del cultivo de la vid.
Así, con esa mirada propia, Finca Río Negro elabora en Cogolludo uno de los vinos más particulares de España. Vinos de altura que derrochan personalidad, entre los que destaca Finca
Río Negro 2016, un tinto a partir de las variedades que integran el viñedo y que complementa a la variedad nacional más reconocida -tempranillo-, con la estructura de cabernet, la frutosidad de syrah y la elegancia de merlot.
En todo ello juega un papel fundamental su a ubicación y, sobre todo, la altura de las viñas, que se encuentran a unos 1.000 metros, en uno de los terruños más elevados desde el centro peninsular hasta el norte de Europa. Esta altitud en el límite tradicional de cultivo es la que proporciona a sus vinos unos matices y cualidades únicos.
Partiendo de aquí, no sorprende que este año hayan decidido aliarse con sus vecinos de Trufazero, de Cifuentes para ser exactos, para crear una Edición Limitada que hará las delicias de los amantes del vino y la trufa en estas fechas tan señaladas. Para este exclusivo pack navideño, Finca Río Negro 2016 se acompaña del Queso Artesano de Oveja Manchego y Trufa de la Alcarria de Trufazero, ese proyecto tan especial dirigido por Javier Canalejas y Loreto Palafox, quienes reivindican el arte de la trufa y ensalzan las sensaciones de este producto en gastronomía.
Se trata de una propuesta rotunda, potente y a la vez armoniosa que ofrece un paso en boca lleno de matices y que invitan a su degustación una y otra vez. Una Edición Limitada que solo está disponible a través del email info@fincarionegro.com o telefónicamente en el 687 97 86 52, y que busca emocionar a través de la gastronomía de siempre, con dos productos que resultan imprescindibles en toda buena mesa.