Jesús Rojas | Madrid |
Tres bodegas únicas y sus tres restaurantes se unen para crear el proyecto N-122 Valle del Duero (N-122 Duero Valley para el público internacional). Una apuesta por el turismo experiencial y gastronómico liderada por Abadía Retuerta, Arzuaga, Pago de Carraovejas y los restaurantes Refectorio, Taller Arzuaga y Ambivium.
En la Milla de Oro de la Ribera del Duero, desde Sardón de Duero a Peñafiel, tres bodegas han logrado no solo que sus vinos sean el referente de un estilo de vida, también que sus restaurantes sean en sí mismos un destino soñado. Una experiencia única, de gran riqueza cultural y en un enclave privilegiado. Ahora, Abadía Retuerta, Arzuaga y Pago de Carraovejas crean N-122 Valle del Duero, la excusa perfecta para recorrer los secretos de la N-122.
Como todas las grandes historias, la de este proyecto surgió en una sobremesa. Y lo hace, además, después que hayamos vivido unos meses terribles en los que la pandemia, además de golpear nuestras vidas, impactó contra el turismo y la gastronomía de una manera nunca antes imaginada. Pero uno de los grandes aprendizajes de este momento que nos ha tocado vivir es que juntos seremos más fuertes, y eso es justo lo que han hecho los creadores de N-122.
Cuando todo parecía imposible y el optimismo se resentía, los equipos directivos de estas tres bodegas se unieron para desarrollar esta iniciativa. Animados por el reconocimiento de la prestigiosa Guía Michelin, en cuyas páginas brillan las estrellas de sus restaurantes gastronómicos (Refectorio, El Taller y Ambivium), comprendieron que esa luz debía servir para iluminar un camino más ambicioso.
Querían crear un destino, un destino único y al nivel de otros de renombre internacional en los que el hedonismo, la cultura y el paisaje fortalecieran su pasión común por el vino y la buena mesa. Un road trip que comienza ya y con el que quieren que vuelvas a soñar.
El lanzamiento de N-122 Valle del Duero llega con invitados de excepción, ya que arranca motores junto a algunos de los mejores talentos creativos de nuestro país. Con ellos se inicia un viaje que es ya una realidad y con parada en las cocinas de los chefs con estrella Michelin Cristóbal Muñoz (Ambivium), Víctor Gutiérrez (Taller Arzuaga) y Marc Segarra (Refectorio).
Pero en N-122 Valle del Duero sucederán muchas más cosas: conciertos, arte, encuentros literarios y cinematográficos, charlas al atardecer… Un sinfín de instantes mágicos marcados por el calendario, las estaciones y tus ganas de emprender el viaje de nuevo.
Restaurante Refectorio, cocina con base en el producto de proximidad
Galardonado con una estrella Michelin desde 2014 y una exclusiva estrella verde en 2020 por su compromiso medioambiental y con dos soles de la Guía Repsol, el restaurante gastronómico Refectorio de Le Domaine Abadía Retuerta está dirigido por el chef Marc Segarra.
Este profesional elabora una cocina basada en el producto de proximidad y las variedades locales para acompañar a la cuidada selección de su bodega y al exquisito refectorio gótico donde se halla.
Restaurante Taller Arzuaga: cocina ribereña de vanguardia
El proyecto gastronómico de Bodegas Arzuaga y el chef Víctor Gutiérrez es Taller Arzuaga, consiguió su primera estrella Michelin al año de su apertura.
Hace una cocina ribereña de vanguardia basada en los productos de la tierra procedentes de su propio huerto biodinámico y especialmente en la caza de la finca La Planta, cuna de los vinos Arzuaga. Situado en un entorno único con vistas a los viñedos y al interior de la bodega, se accede a través de un pasillo interactivo.
Restaurante Ambivium, la apuesta de Pago Carraovejas
Una experiencia diferente en torno al vino, la oportunidad de viajar por el mundo a través de decenas de copas. Ambivium es la apuesta de Pago Carraovejas nacida en la Ribera para revelar los aromas de este y otros terruños.
Un equipo, con el chef Cristóbal Muñoz al frente y con David Robledo (ex Santceloni) ejerciendo de Director Gastronómico, cuyo valor es respetar los sabores del pasado aportando individualmente vanguardismo e innovación en el marco de una elaboración creativa. También cuenta con una estrella Michelin, en este caso desde 2020.